Oración tras la
comunión, domingo 21 de julio de 2024.
Señor,
no tienes manos.
Tienes
sólo nuestras manos,
para
construir un mundo nuevo,
donde haya más fraternidad y justicia.
Señor,
no tienes pies.
Tienes
sólo nuestros pies,
para
poner en marcha a los oprimidos,
por
el camino de la libertad.
Señor,
no tienes labios.
Tienes
sólo nuestros labios,
para
anunciar a los pobres
la
Buena Noticia del amor.
Señor,
no tienes medios.
Tienes
sólo nuestro trabajo,
para
lograr que todos los hombres
vivan
como hermanos.
Señor,
aquí tienes
mis
manos, mis pies,
mis
labios, mi tiempo, mi ilusión…
Dispón
de ellos como quieras.
Amén.