Palabra de vida (Lucas 24,13-35)

 

Palabra de vida (Lucas 24,13-35), breve comentario del Evangelio del domingo III de Pascua, 23 de abril de 2023.

Después de la muerte de Jesús, sus discípulos se hundieron en la más terrible oscuridad. Habían perdido a un amigo; las esperanzas para la libertad de su pueblo se esfumaban; y eran conscientes de que habían visto morir agónicamente al mejor de los hombres que podía dar la historia.

Con esa experiencia tan dura, dos de ellos, uno llamado Cleofás y otro, del que no se dice el nombre, conversaban y discutían caminando. Hablaban sobre las promesas de la Primera Alianza, sobre Moisés y los Profetas, y sus anuncios de salvación. Al principio no se dieron cuenta, pero en esa lectura de la Biblia, Jesús en persona se hizo presente en ellos, y les fue mostrando el sentido y la esperanza que había en su vida; les recriminó su cerrazón de corazón y los afianzó en la Verdad de haber seguido a Jesucristo. Su corazón ardía al ver cómo la Escritura iluminaba sus vidas, su oscuridad.

Los creyentes tenemos que hacer lo mismo: la Biblia ha de ser nuestro libro de oración. Leer una palabra y encontrar en ella la palabra de esperanza que Dios tiene para nosotros; ir a la Palabra con nuestra vida y descubrir cómo nos desvela un sentido profundo y lleno de amor, en lo que a nosotros nos llenaba de zozobra o nos pasaba desapercibido. Qué importante es tener la Biblia como libro de oración.

Cleofás y el otro (aquí puedes poner tu nombre) acogieron la Verdad plena de lo que escucharon al partir el pan, y reconocer a su Maestro vivo y fuente de vida.